"Oasis" particulares...

Una de las cosas que mas me esta sorprendiendo, es la capacidad del ser humano para adaptarse al medio en el que toca vivir. A lo largo de mi experiencia asiática, en todos los países he visto cómo "la clase media", a la hora de dormir las 5 a 7 horas que destinan a ello, prepara su colchón en la recepción del hotel donde trabajan, extienden su colchoneta en la habitación que comparten con mas gente, o en el caso de India, recogen la cena del mantel en el que se sientan en el suelo, y en su lugar, se van colocando unos junto a otros, para pasar la noche.
En mi caso, a lo largo de estos meses me ha tocado experimentar lechos totalmente opuestos...desde pequeñas colchonetas compartidas en el suelo (que bien hice en agenciarme un par de sábanas de aquel tren cama que me llevó de Agra a Vananasi hace ya casi 6 meses!), hasta auténticos palacetes en Guest Houses u Hoteles inmersos en el entorno (bosques, templos, casas balinesas como en la que ahora estoy...), limpios, y ricos en decoración típica de cada lugar.
Sitios donde tras aplicarte el repelente de mosquitos y taparte hasta la cabeza, cerrar los ojos y no abrirlos hasta que consideres que has recargado tus pilas lo suficiente para seguir viajando... frente a otros auténticos tesoros en los que te quedarías a vivir!!!
Una vez mas, quiero destacar la increible experiencia Couch Surfing... y las sorpresas que te prepara cuando menos te lo esperas!
Como sacamos en conclusión tras El Camino, tras cada experiencia toca mirar hacia adelante... Para bien o para mal, tu última morada quedó atras, y como en la vida misma, no debemos aferrarnos a "lo que fue", a los recuerdos, a las fotografías... Es momento de disfrutar del presente (= regalo?), dispuestos a la siguiente aventura...